ATFFS-TUMBES-PIURA.
Frecuentan ríos donde buscan alimentos
HALLAN VALIOSAS EVIDENCIAS DE NATIVOS NO CONTACTADOS EN PARQUE NACIONAL ALTO PURÚS
Ricardo Jon, cuyas pruebas desvirtuaron que indígenas fotografiados no eran peruanos, hace relato de la zona y muestra más vistas gráficas
En ciertos ríos que recorren el Parque Nacional Alto Purús se han encontrado valiosas evidencias que demuestran la presencia de indígenas nómadas voluntariamente asentados en territorio peruano, cuyo lugar exacto de asentamiento no será revelado por el Instituto Nacional de Recursos Naturales (INRENA) con el fin de salvaguardar su hábitat.
Dichos vestigios fueron encontrados por guardaparques de la Intendencia de Áreas Naturales Protegidas, dependencia de INRENA y evidenciada por Ricardo Jon Llap, coordinador del Parque Nacional Alto Purús en Lima, quien sostuvo que las fotografías de nativos no contactados difundidas recientemente no correspondían a peruanos sino a brasileños teniendo en cuenta las características nómadas de los nuestros.
El propio fotógrafo brasileño, José Carlos Meirelles, puso fin a toda la historia tejida en torno a los indígenas, al afirmar que son brasileños conocidos hace 100 años. El reportero confesó, incluso, la forma cómo planeó publicitar las fotografías con el fin de llamar la atención para su protección.
Al respecto, Ricardo Jon dijo que desde el comienzo supo que se trataba de vistas de brasileños en su territorio y no de peruanos huyendo de supuestos taladores ilegales con destino a Brasil.
Reiteró que su condición de nómadas los hace distintos y que se tienen evidencias de su frecuente paso por determinadas áreas cercanas a los ríos, donde acuden para abastecerse de alimentos a través de la caza, pesca y recolección.
Refirió que en los diversos patrullajes y salidas de campo realizadas en el interior del área natural protegida se ha constatado –gracias a los restos que dejan- la presencia de estos grupos humanos.
“Lo que se ha podido encontrar son refugios temporales de hojas de palmera -típicas viviendas de ellos- en las playas de los ríos y al interior de la selva, así como restos de tortugas terrestres y de monos que han servido para su alimentación”, reveló.
Jon dijo también que los indígenas bajan de las cabeceras de los ríos hacia las playas en busca de huevos y de las mismas tortugas, así como de peces que quedan atrapados en las pozas en época de estiaje (nivel más bajo de los ríos).
“Cuando no tienen la facilidad de conseguir los huevos de tortugas, o las mismas tortugas acuáticas, empiezan a consumir recursos terrestres como las tortugas motelo. Usan, además, sus arcos y flechas para cazar, generalmente animales grandes, como la sachavaca”, relató.
Jon sostuvo enfáticamente que en el Parque Nacional Alto Purús-PNAP no existe tala ilegal pues la Intendencia de Áreas Naturales Protegidas, y la jefatura del Parque con apoyo de la cooperación internacional, han establecido un fuerte sistema de control en las salidas de los ríos. Existe, también un plan de vigilancia comunitaria donde los mismos nativos de la población local participan en labores de control y vigilancia junto a los guardaparques oficiales.
El técnico del INRENA tuvo mucha cautela en no revelar los lugares de ubicación de las evidencias. “El Parque es demasiado grande y queremos mantener a buen recaudo el área por donde se desplazan los grupos indígenas nómadas voluntariamente aislados en determinadas épocas del año. Desde los puestos de control del PNAP se protege los derechos de desplazamiento de los no contactados”, subrayó
Ricardo Jon, cuyas pruebas desvirtuaron que indígenas fotografiados no eran peruanos, hace relato de la zona y muestra más vistas gráficas
En ciertos ríos que recorren el Parque Nacional Alto Purús se han encontrado valiosas evidencias que demuestran la presencia de indígenas nómadas voluntariamente asentados en territorio peruano, cuyo lugar exacto de asentamiento no será revelado por el Instituto Nacional de Recursos Naturales (INRENA) con el fin de salvaguardar su hábitat.
Dichos vestigios fueron encontrados por guardaparques de la Intendencia de Áreas Naturales Protegidas, dependencia de INRENA y evidenciada por Ricardo Jon Llap, coordinador del Parque Nacional Alto Purús en Lima, quien sostuvo que las fotografías de nativos no contactados difundidas recientemente no correspondían a peruanos sino a brasileños teniendo en cuenta las características nómadas de los nuestros.
El propio fotógrafo brasileño, José Carlos Meirelles, puso fin a toda la historia tejida en torno a los indígenas, al afirmar que son brasileños conocidos hace 100 años. El reportero confesó, incluso, la forma cómo planeó publicitar las fotografías con el fin de llamar la atención para su protección.
Al respecto, Ricardo Jon dijo que desde el comienzo supo que se trataba de vistas de brasileños en su territorio y no de peruanos huyendo de supuestos taladores ilegales con destino a Brasil.
Reiteró que su condición de nómadas los hace distintos y que se tienen evidencias de su frecuente paso por determinadas áreas cercanas a los ríos, donde acuden para abastecerse de alimentos a través de la caza, pesca y recolección.
Refirió que en los diversos patrullajes y salidas de campo realizadas en el interior del área natural protegida se ha constatado –gracias a los restos que dejan- la presencia de estos grupos humanos.
“Lo que se ha podido encontrar son refugios temporales de hojas de palmera -típicas viviendas de ellos- en las playas de los ríos y al interior de la selva, así como restos de tortugas terrestres y de monos que han servido para su alimentación”, reveló.
Jon dijo también que los indígenas bajan de las cabeceras de los ríos hacia las playas en busca de huevos y de las mismas tortugas, así como de peces que quedan atrapados en las pozas en época de estiaje (nivel más bajo de los ríos).
“Cuando no tienen la facilidad de conseguir los huevos de tortugas, o las mismas tortugas acuáticas, empiezan a consumir recursos terrestres como las tortugas motelo. Usan, además, sus arcos y flechas para cazar, generalmente animales grandes, como la sachavaca”, relató.
Jon sostuvo enfáticamente que en el Parque Nacional Alto Purús-PNAP no existe tala ilegal pues la Intendencia de Áreas Naturales Protegidas, y la jefatura del Parque con apoyo de la cooperación internacional, han establecido un fuerte sistema de control en las salidas de los ríos. Existe, también un plan de vigilancia comunitaria donde los mismos nativos de la población local participan en labores de control y vigilancia junto a los guardaparques oficiales.
El técnico del INRENA tuvo mucha cautela en no revelar los lugares de ubicación de las evidencias. “El Parque es demasiado grande y queremos mantener a buen recaudo el área por donde se desplazan los grupos indígenas nómadas voluntariamente aislados en determinadas épocas del año. Desde los puestos de control del PNAP se protege los derechos de desplazamiento de los no contactados”, subrayó
Fuente: OC-INRENA
